viernes, 23 de diciembre de 2011

LA FOTOGRAFÍA INDEFINIBLE

Ensayo realizado a partir de la lectura de La Cámara Lucida de Roland Barthes.  

En el trayecto de mi corta existencia, (con lo pueril y  poco experimentada que ha sido), nunca me he conformado con la definición de lo que es la fotografía. Desde mi punto de vista, y a partir de las lecturas que he realizado, ningún teórico ni filosofo ha sido capaz de darme una respuesta satisfactoria a este interrogante. No soy un intelectual, simplemente esas definiciones me han dejado estancado, quizá nos las comprendo ni las comparto,  por el simple hecho de que no he vivido lo que esos escritores han dicho, ellos no  me han llevado a un más allá de la razón y las banalidades. Y  hoy creo saber por qué. 

No es que piense que para entender algo primero tengo que vivirlo, aunque ayudaría mucho. Pienso más bien que las interpretaciones que puedan surgir de la vida, por ejemplo de una fotografía,  son individuales.

Hace algunos días vengo madurando la idea: creo que jamás me conformaré con ninguna definición por preciosista y audaz que sea. Y esto no indica necesariamente,  que voy a estar predispuesto a encontrarle el punto de caída a cada respuesta, no. Lo que quiero decir, es que en mi interior hay un sinsabor hacia  esas palabras con las que las personas suelen definir ese instante mágico.

No creo que se logre delimitar el derrame de sensaciones que percibo cuando se cierra el obturador o cuando intento  comprender, o no, lo que me dicta una fotografía.  Y es que es un instante, por lo menos para mí, de intimidad, de encerrarme en mi interior para intentar darle una significación a un torrente de pensamientos.

Este hecho me impone una ideología: lo que se diga de la fotografía  no será asimilado de igual manera por dos personas, por la sencilla razón de que ese es un momento individual. El consenso interior que yo logre a partir de la interpretación de la realidad, sea de la vida o de una fotografía, va a ser solo mío y de nadie más.

Y eso es lo que me pasa precisamente al leer, por ejemplo la cámara lucida de Roland Barthes: no puedo estar de acuerdo con su corriente de pensamientos. Él se pierde en una tediosa serie de divagaciones mentales,  de lo que es su concepción sobre las fotos, además busca explicar ese no sé que oculto en las de su agrado.  Eso precisamente, va en contra de mis pensamientos, por lo acertadas que puedan ser sus observaciones. Explicar una fotografía, es pretender explicar la existencia de la magia.

Hay fotografías que me gustan con pasión, las observo y no sé qué es lo que me atraen de ellas. Lo dejo ahí, no voy más allá, no quiero arruinar esa felicidad sin razón, no hago lo de Barthes, no busco un punctum.  No me importa si estoy en lo correcto o en lo equivocado (de hecho ese no es el meollo del asunto), pienso más bien, que las miradas sobre las fotos son indefinibles, incalculables, individuales.

No voy a intentar darle una definición a la fotografía, no voy a decir que la fotografía es la captura de ese instante, de ese espacio y  tiempo que jamás se volverá a repetir; tampoco voy a decir, que  obturar es jugar a hacer magia con la realidad, porque no me lo permito, porque cometería el mismo error de Barthes, de universalizar un concepto que solo puede ser propio, intimo y personal. No creo que existan palabras para denominar eso que es la fotografía, tampoco creo que las haya para delimitar aquello que llamamos vida, porque ambas funcionan con la misma dinámica incomprensible.     

Estoy seguro que no existen verdades absolutas en el campo de la realidad, de la vida. No hay dos miradas iguales sobre el mundo, ni siquiera en el caso más extremo de socialización compartida. Cito el caso de dos gemelas que conozco, que aunque fueron criadas con las mismos valores y costumbres, en el mismo contexto, compartieron padres, maestros, hermanos  y amigos,  y aún así tienen una visión diferente sobre la realidad, disienten en cuestiones tan triviales como su color favorito. 

Este simple hecho demuestra, por lo menos a mí, que no hay dos lecturas exactamente iguales sobre una fotografía.  Y que mucho menos se puede definir lo que es, y se lograrla hacer, solo sería útil para el que la formula.

Fotografías del sentimiento abstracto
A continuación una serie de fotografias que a simple vista pareciera que no tienen una sola cosa en común, pero las tiene y son varias: Es evidente el propósito de salir a la calle y capturar esos momentos que llaman la atención al fotógrafo, sin en ese preciso instante saber el por qué, y quizá nunca lo sepa. No hay presencia de personas o animales. Todas tienen una intención oculta. Por último , todas despiertan una sensación en el fotógrafo que él no puede describir.    



Árbol en llamas 
  Para mi ese árbol está en llamas y no diré una sola palabra más. 

Faro al cielo
Una lampara que sale de la nada y que se opaca por los rayos del sol: una competencia imposible. Es eso o no sé lo que me gusta de la imagen. Foto sacada un medio día cualquiera que no se repetirá en Marinilla.     

Llamado al viaje

No se cuál es la sensación que me transmite esa imagen, la flecha que no acaba, la luz del día que solo se ve azul en la parte de cielo que fotografié, (porque en el resto está gris), o quizá el llamado oculto al viaje. 





Esquina en la que alguien quisiera vivir

He transitado por esta cuardra de día y de noche, la he fotografiado mil veces con mi presencia, se soponía que iba a quedar mejor, pero aún así decido ponerla acá, porque hay algo en ella que acaba por convencerme, debe ser la soledad, o quizá la sensación de pelea entre la urbe y la naturaleza. 


Desde su sombra 
No suponía que esa sombra oscura que sale en la parte izquierda de la imagen quedara así, sé que esa sombra es una cadena, lo que no sé es porque me atrae.     





Panoptimso 
Tiene contenido, lo tiene: El control invisible sobre nuestra sociedad. A manos abiertas la imagen de Jesús en una de las colinas del pueblo, no se puede ocultar la sensación de que dios todo lo ve. A la derecha un poste de luz, y en  ese poste una de las cámaras de vigilencia del pueblo que son monitoreadas por la Policía Nacional. El concepto del panoptismo aplicado en toda la expresión. 

Azul extraño
No me decidí hasta el último segundo de incluir esta imagen, todo el tiempo estuvo descartada. no diré qué es ni por qué me gusta, quiza cambie de desición de nuevo y decida bajarla.  





Felipe Ramírez Valencia